martes, 5 de mayo de 2015

Vuelo interrumpido.

Tenía seis años. Me encontraba en el patio trasero de mi casa, llorando por uno de los tradicionales castigos arbitrarios que solía recibir de mis principales fuentes de amor y seguridad. De pronto, una triste escena era representada frente a mis ojos. Una mariposa salía de su crisálida, pero mientras una de sus alas se erguía orgullosa, la otra parecía atrofiada y oscura. 

Quise ayudarla. Tuve tantas ganas de que volara que extendí su ala pequeña para que pudiese elevarse y huir.

Me quedé con polvillo naranja entre mis dedos. Segundos después, me obligaban a entrar a casa para una nueva paliza. Nunca más supe de la mariposa.

Hoy, casi treinta años después de aquel incidente, vi un vídeo sobre el nacimiento de otra mariposa. Al salir de la crisálida, sus alas también eran negras, y a los pocos minutos se extendieron de forma natural y le permitieron emprender su vuelo.

Al parecer, debí dejarla, jamás debí tocarla para apurar su huida.
Al parecer, no logré volar.

A meta approximation to a Schrödinger's heartbreak.

For a long time, I thought about writing down your effect on me, and the recurrent image was the effect of the Moon over the sea, or Tides. ...